lunes, 11 de febrero de 2013

El silencio de los corderos / La paz de los cementerios

Esperaríamos que considere la campaña mundial BDS a Israel en la que participa nuestra asociación en apoyo al pueblo palestino, una de las "discrepancias legítimas sobre mi decisión de venir", tal como se puede leer en su blog.

Es muy probable que no, puesto que ha sido usted sordo al lamento del pueblo palestino, insensible al llamamiento que le han hecho intelectuales emblemáticos de todo el Planeta y ciego ante "las uñas sucias de la miseria" parafraseando a Benedetti.

Y perdone usted que parafraseemos a Benedetti, ya que usted estos días se he manifestado reiteradamente en contra de la izquierda, ya que la izquierda es incapaz (según usted) de entender la altura de miras que encierra ir a recoger un premio tan bien pagado en euros y al contado.

Denuncia usted la desazón que le ha producido encontrar en su blog o en su perfil de facebook acusaciones de recibir un premio de las "manos manchadas de sangre" de Simon Peres o que se acuse de "genocidio" a los dirigentes políticos y militares del Estado de Israel. Como quiera que algunas de esas acusaciones en internet han partido de socios de nuestra asociación, reciba nuestras disculpas pues no era nuestra intención provocar su desazón, sino hacer un llamamiento a su sensibilidad. Y le pedimos disculpas en la medida que esto último ha demostrado ser una perdida de tiempo, como seguramente lo es escribir estas líneas.

Termina usted este "post" en su "blog" (perdone usted, gran bruñidor de la lengua castellana, por tantos anglicismos) que "Es curioso ..que haya un cierto número de presuntos partidarios de la paz y de la justicia que desde la seguridad de Europa, de España, manifiesten un odio de una furia verbal y de una intensidad que yo no había experimentado nunca, o casi".

Nos gustaría comentarle que desde la seguridad de Europa bastantes miembros de nuestra asociación hemos gastado tiempos de nuestras vacaciones y renunciado en multiples ocasiones a esa seguridad europea que usted denuncia, en vivir la realidad palestina conviviendo con la población palestina allí donde sufre: en sus casas , en su vida cotidina, en el dolor que usted no ha llegado a vislumbrar desde la ventana de su hotel dese el que dice usted reconocer Granada o Toledo. Como podría reconocer cualquier otra parte del Planeta...excepto la que ha visitado, pués desde esa torre de marfil en la que ha pernoctado ha sido incapaz de descubir la injusticia de la ocupación militar de Gaza, Cisjordania y de la mitad de esa Jerusalén en la que usted ha dormido sin entererase de lo que ocurre a su alrededor.

Porque si ustede quisiera experimentar "odio y furia verbal" le hubiera bastado alquilar un coche y visitar a los colonos que ilegalemente ocupan Jerusalén Oriental. (Confiamos que leyando el adverbio "ilegalmente" no experimente usted odio, sino que descubra un resumen de infinidad de resoluciones de las Naciones Unidas). Y si hubiera ido con el coche pocos kilómetros más allá, tras el control militar de Qalandia, hubiera podido encontrarse con los militares que custodian esa paso a la salida de Jerusalén y al hablar con ellos y ellas intentar encontrar alguna palabra que no fuese de odio hacia el pueblo palestino.

Usted dice haberse reencontrado con el silencio y la paz al volver a su hotel y soñar con Granada o con Toledo. No le quepa duda que esa paz es la paz de los cementerios y que, como a la Clarise que interpretaba Jodie Foster, le tenemos que preguntar si los corderos han dejado de gritar en sus pesadillas, o si ese bien dotado premio le ha devuelto al silencio de los corderos.

Asociación Paz Ahora.
info@pazahora.org
http://www.pazahora.org